Consejos para el cuidado bucal

Consejos para el cuidado bucal

Una boca bien cuidada es fundamental para el bienestar de las personas, facilita una comida satisfactoria y permite la comunicación. Mantener una correcta higiene bucal es la base de los cuidados.

Cuándo es más importante: El cuidado de la boca es especialmente importante cuando nuestra inmunidad está alterada, es decir, cuando nuestro sistema defensivo ha perdido eficacia. ¿Por qué? Porque eso favorece las infecciones, que generan mucho malestar e incluso pueden dificultar la alimentación de una persona. Esto suele suceder en estados de debilidad generalizada (a causa de una enfermedad grave o de la suma de varias patologías crónicas), o cuando el enfermo se somete a tratamientos que afectan a su inmunidad, como la quimioterapia o la radioterapia. Es en estos casos cuando hay que extremar las precauciones. Recomendaciones y medidas: Para mantener una higiene bucal óptima:

  • Es necesario un cepillado de los dientes y la lengua después de cada comida con un cepillo suave (ejemplo: infantil), con mucho cuidado de no irritar ni causar lesiones.
  • Si el enfermo está muy débil o el cepillado es dificultoso, puede hacerse con una torunda de gasa.
  • Emplear o aplicar un antiséptico suave para mantener la boca limpia, a ser posible mediante enjuague. Por ejemplo, con colutorio de clorhexidina al 0,2%.
  • Para eliminar el sarro (o placa bacteriana visible), se pueden emplear:
    • Agua oxigenada diluida: una parte de agua oxigenada y tres partes de suero fisiológico.
    • Bicarbonato diluido.
    • Un trocito de comprimido efervescente de vitamina C.
  • Mantener una higiene escrupulosa de la prótesis dental, y retirarla por la noche.

Para mantener la humedad:

  • Mantener los labios hidratados con cremas labiales hidratantes, como por ejemplo la crema de cacao.
  • Recurrir a diferentes “trucos” o técnicas para humedecer la mucosa oral.

Cuándo consultar al médico:

  • Si la boca está muy seca.
  • Si aparecen placas blanquecinas: pueden indicar infección por hongos que requiera tratamiento específico.
  • Si aparecen úlceras, erosiones o lesiones de la mucosa.
  • Si hay dolor en la boca.